Los gambones son uno de los mariscos más demandados y apreciados en la cocina española. Su bajo contenido en grasas, así como su rico aporte de proteína y minerales, convierten a los gambones en uno de los platos más saludables de la dieta mediterránea. Cocinarlos es bastante sencillo, no entraña dificultades especiales. En el siguiente post, te explicaremos todo lo que debes tener en cuenta para cocer gambones congelados.
Para comenzar, si has comprado unos gambones congelados te aconsejamos que los retires del congelador unas 12 horas antes de cocinarlos, de este modo podrán descongelarse de forma natural, evitando que pierdan su textura o propiedades más características. Puedes seguir el procedimiento siguiente:
- Retira los gambones, y colócalos en un recipiente hermético.
- Ubica el recipiente en el estante inferior del frigorífico. Es muy importante que evites sumergirlo en agua caliente. Tampoco lo dejes a temperatura ambiente, ya que ambas acciones podrían aumentar el riesgo de contaminación bacteriana.
Una vez descongelados, puedes retirar los gambones para poder cocinarlos. (Recuerda: si no vas a utilizarlos una vez descongelados, es recomendable que los almacenes en el frigorífico y los cocines en un plazo de dos días).
¡Ya podemos comenzar!
Cocer Gambones
Como te decíamos antes, cocer los gambones es muy sencillo. Tan sólo necesitarás 3 ingredientes:
- Gambones (cantidad a elegir según necesidad)
- Agua
- Sal
Pasos a seguir
En primer lugar, lavamos los gambones cuidadosamente debajo del grifo, retirando las patas y las antenas. Sucesivamente, deberás rellenar una olla con suficiente agua como para cubrir completamente los gambones.
- Cuando el agua esté hirviendo, sumerge los gambones en la olla y cocina durante 2-3 minutos. Es importante que tengas cuidado y no los cocines demasiado tiempo, para evitar que la carne se vuelva dura y seca.
- Retira los gambones del agua hirviendo y colócalos en un recipiente con agua fría y hielo, para así detener el proceso de cocción y conseguir enfriarlos rápidamente.
- Una vez que estén fríos, escúrrelos y sirve inmediatamente.
¿Con qué salsa acompañar los gambones?
Los gambones, al igual que otros mariscos, tienen un sabor único y delicioso. Podemos potenciarlo acompañándolo de diferentes salsas, con base en nuestros gustos y preferencias. Algunas ideas:
- Salsa de ajo y limón: Una salsa que casa muy bien con el sabor de los gambones. Para prepararla, únicamente debes mezclar ajo picado, jugo de limón fresco, aceite de oliva y sal y pimienta al gusto.
- Salsa de mantequilla y limón: Si quieres elaborar esta salsa para acompañar a tus gambones, derrite mantequilla en una sartén, agregando jugo de limón fresco y sal y pimienta al gusto.
- Salsa de tomate y chili: Una salsa irresistible si eres un amante del picante. Mezcla tomates frescos picados, chiles picados, cilantro fresco picado, jugo de limón fresco y sal y pimienta al gusto. ¡Ya la tienes!
- Salsa de mango y jengibre: Quizás prefieres apostar por un sabor más tropical para potenciar el sabor de los gambones. Si quieres preparar esta deliciosa salsa de mango y jengibre, tan solo deberás mezclar mango picado, jengibre fresco rallado, jugo de lima fresco y un poco de azúcar y sal al gusto.
Estas son tan solo algunas pinceladas de las salsas que puedes utilizar para aliñar tus gambones. ¡Una explosión de sabor en un bocado!
¿Cómo cocer gambones congelados?
Seguramente, lo más indicado sería dejar descongelar los gambones durante unas 12 horas, previamente a cocinarlos. Si bien, sabemos que esto no siempre es posible.
Por tanto, te facilitamos algunas soluciones, rápidas y eficaces, para que disfrutes de unos buenos gambones recién sacados del congelador.
- Si tienes a tu disposición unos gambones, descongela ligeramente.
Puedes realizarlo de diferentes modos. Bien dejarlos en su bolsa, o sumergirlos en agua templada durante 10 minutos. Una vez pasado ese tiempo, enjuaga debajo del grifo.
- Si tienes unos gambones crudos sin pelar, el procedimiento es el mismo que el anterior. Puedes seguir estos sencillos pasos:
- Prepara una olla llena de agua y sal (la cantidad de agua deberá ser suficiente para cubrir los gambones).
- Coloca la olla en el fuego y espera a que el agua hierva.
- Introduce los gambones congelados (ten cuidado de no agregar demasiados al mismo tiempo, para evitar que el agua se enfríe y la cocción no sea uniforme).
- Cocínalos durante 4-6 minutos (este tiempo puede variar según el tamaño de los gambones).
- Una vez cocidos, retirarlos, dejando que escurran durante unos minutos antes de servirlos.
Gambones al horno congelados
Si tienes a la vista una cena improvisada con amigos o familiares, y tan solo unos gambones en el congelador, te facilitamos una receta rápida y sencilla, que te permitirá disfrutar de la compañía de tus invitados sin necesidad de ensuciar tu cocina.
Receta de gambones al horno congelados:
- Una vez fuera del congelador los gambones, pon agua a hervir e introdúcelos como te hemos mencionado anteriormente, con la única diferencia que, una vez que notes a los gambones ascender, deberás sacarlos rápidamente y pasarlos por “baño María” hirviendo.
- Prepara todos los vegetales que necesitas: ajo picado, perejil, jugo de limón y sal. Si prefieres dar a tus gambones un toque picante, puedes abrir un par de guindillas y quitarle las partes blancas y las semillas.
- Mientras vas triturando todos los ingredientes al horno, no olvides precalentarlo a 175-180 grados.
- Coloca los gambones en una bandeja para horno, y úntalos con aceite de oliva.
- Distribuye la mezcla uniformemente, y hornea unos 8-10 minutos hasta que se vean dorados. (Descongelar los gambones precocinados reducirá el tiempo de cocción de 14-20 minutos a tan solo 8-10).
Como puedes ver, cocinar gambones no es tan difícil como parece.
Te mostramos también la diferencia que hay entre el gambón y el langostino.
Esperamos que este post te haya sido de utilidad, y recuerda: en Compesca puedes encontrar nuestros gambones de la más alta calidad.
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